viernes, 22 de mayo de 2009

Hecho de hombres


Lo sentimos. No somos nosotros, es el monstruo. El banco no es como un hombre.
Sí, pero el banco no está hecho más que de hombres.
No, estás equivocado. Estás muy equivocado. El banco es algo más que hombres. Fíjate que todos los hombres del banco detestan lo que el banco hace, pero aún así el banco lo hace. El banco es algo más que hombres, créeme. Es el monstruo. Los hombres lo crearon, pero no lo pueden controlar.
Los arrendatarios gritaron:
-El abuelo mató indios, Padre mató serpientes, por la tierra. Quizá nosotros podamos matar blancos, que son peores que los indios y las serpientes. Quizá tengamos que matar para conservar la tierra, igual que hicieron padre y el abuelo.
Y ahora los hombres de los propietarios se encolerizaron.
Os tendréis que ir.
Pero es nuestra, gritaron los arrendatarios. Nosotros...
No. El banco, el monstruo es el propietario. Os tenéis que ir.
Sacaremos nuestras armas, como hizo el abuelo cuando vinieron los indios. ¿Y entonces qué?
Bueno, primero el sherif, después las tropas. Si intentáis quedaros estaréis robando, seréis asesinos si matáis para quedaros. El monstruo no está hecho de hombres, pero puede hacer que los hombres hagan lo que él desea.

John Steinbeck. Las uvas de la ira. (ed. Cátedra)

domingo, 17 de mayo de 2009

Quien pecho abarca, loco aprieta

Al final, Mario también cogió el autobús. Buen viaje