domingo, 14 de diciembre de 2008

Por un pelo

¡Qué reflejos!

3 comentarios:

Antonia dijo...

le tenía que haber dado en todo el careto

Ángel Munárriz / Alberto Barrio dijo...

Ana cree que esa reacción felina es la prueba irrefutable y definitiva de que George W. Bush no pertenece a la especie humana. Yo ya intuí algo en la película de Michael Moore, la de los atentados del 11-S. Cuando lo están maquillando, su gesto es androide, y eso que nunca he visto un androide salvo a Falete. De todas formas, he de confesar cierta simpatía por Bush. Sus bailes, meteduras de pata y fanfarronadas son adorables. Y también el punto que ha tenido al valorar el incidente del zapato ante la prensa: "Si quieren más datos sobre el atentado, les diré que el arma es del número 44". O algo así. Tal y como son los estadounidenses, después de tal demostración de reflejos y de odio soberbio en la mirada (sólo un instante, pero se aprecia el infinito desprecio tras el zapatazo) y sentido del humor, si Bush pudiera presentarse ahora a presidente, yo creo que ganaba. Obama es mucho menos divertido.

PD: Lo que más me ha molado de todo este rollo es que, según una de las 14 versiones que circulan sobre lo que le dijo el periodista iraquí a Bush, sus palabras fueron: "Tu beso de despedida, pedazo de perro". "Pedazo de perro". Extraordinario.

Anónimo dijo...

pues a mí me cae fatal